Me llamo Lara Freire. Mi afición por el cine viene desde pequeña, con seis años mi madre, una cinéfila empedernida que se pasaba el día grabando películas en cintas beta, me llevó a clases de teatro y aquello despertó al monstruo.
Empecé delante de las cámaras y con el tiempo me fui sintiendo cada vez más atraída por aquella gente que andaba de un sitio para otro, detrás, en la oscuridad…
…

.tras pasar por Filosofía y dar un montón de vueltas descubrí la Escuela de Cinematografía de la Comunidad de Madrid (E.C.A.M), donde me diplomé en Interpretación.
Durante los años de escuela estuve implicada en los proyectos que surgían fuera de clase y me inicié en el mundo de los decorados.
Al terminar lo tenía muy claro, quería estar detrás.

Trabajé durante cinco años como directora de arte en cortos, largometrajes y video clips. En este campo he sido autodidacta…

.y he tenido la gran suerte de acercarme a preguntar a grandes maestros como Juán Mariné, Luis Berdejo, Pablo Rosso y Emilio Ruiz (Oscar 2007 por El laberinto del Fauno), entre otros, y que se tomaran la molestia de enseñarme.
Gracias a ellos, a su energía, al empirismo inculcado en mi infancia en el colegio Británico, a mi insaciable curiosidad y a la confianza de la gente que me ha ido dado la oportunidad de formar parte de un equipo y de probar maneras de hacer visibles los mundos que imaginábamos, fui aprendiendo la profesión.

Después vinieron las vacas flacas del cine y mucho tiempo libre….
Decidí aprovechar este momento para subsanar carencias que me impedían avanzar y seguir profundizando; para ello elegí las herramientas que ofrece la Arquitectura.
Me siento afortunada por haberme adentrado con una formación cinematográfica previa y otros puntos de vista de elementos comunes como el proceso, la escala, el tiempo, el espacio, los recorridos, el ritmo, la luz, las direcciones, las miradas, el tono, las sensaciones,…; una idea en la cabeza de una persona y un equipo que hace visible ese universo abstracto…

Lo que empezó como complemento al cine es hoy un gran campo de oportunidades en el que interactuar con la sociedad de una manera directa y cotidiana. Para mi la arquitectura es una herramienta de cambio que cruzada con otras disciplinas multiplica exponencialmente el campo de oportunidades.

Estoy en cuarto en la Escuela Politécnica San Pablo Ceu de Madrid, y desarrollo intervenciones urbanas y trabajos en equipo: www.bicimad07.blogspot.com

Asistí al taller de Dubrovnik gracias al blog de Ecosistema Urbano y allí conocí a Belinda Tato, José Luís Vallejo, Izaskun Chinchilla y Roman Silje…

.todos ellos me abrieron la mente en cuanto a maneras de abordar los proyectos, procesos, herramientas y gestión de todo tipo de recursos.

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