A principios del pasado mes de mayo de 2011 terminábamos un artículo (por @belindatato + @jlvmateo) para el siguiente número de la revista Arquitectura Viva (nº 136 Escenarios Urbanos). Nuestra idea era reflexionar sobre los nuevos espacios de oportunidad para la ciudad al calor de las nuevas tecnologías, demostrando la obsolescencia de las herramientas aplicadas sistemáticamente desde disciplinas autistas como el urbanismo contemporáneo. Una semana después de entregar el texto nos sorprendió el alcance y dimensiones del fenómeno 15M en la Puerta del Sol de Madrid, demostrándonos hasta que punto nuestras reflexiones eran algo que se respiraba en el ambiente.
Os dejamos en este post el texto original, previo a la inclusión de algunas modificaciones (nuevo título, etc.) que fueron necesarias para encajar el artículo en el contexto del número de Arquitectura Viva. Nos quedamos también con la primera frase del texto introductorio de la revista, escrito por Luis Fernández Galiano:
La ciudad no son los edificios, es la gente.
Nuevas experiencias para una ciudadanía aumentada
Participación y ciudadanía
Wikipedia define el concepto de participación ciudadana como la integración de la ciudadanía en el proceso de adopción de decisiones del gobierno de una ciudad, autonomía o país. Para que una ciudad o un país proporcione los mejores servicios y oportunidades a la población, debe contar con un gobierno abierto y receptivo, dispuesto a escuchar lo que los ciudadanos necesiten transmitir para contribuir a mejorar la política y la gestión de los asuntos públicos.
En los países con sistemas de gobierno basados en la democracia representativa, los ciudadanos ostentan la titularidad del poder político y designan a sus representantes para que asuman la gestión política y administrativa. A partir de ese momento, ellos gobiernan y los electores permanecemos inactivos hasta la siguiente oportunidad de acción. Las elecciones son la única ocasión para expresarnos y participar en la toma de decisiones sobre la esfera de lo público. A pesar de las contadas ocasiones en que somos protagonistas ejerciendo el derecho al voto, las estadísticas en España sobre los índices de abstención nos dan una idea de que existe un porcentaje elevado de la población que no acude a votar (año 2000: 31,3%, año 2004: 24,4%, año 2008: 24,7%).
Este sistema de democracia indirecta o representativa, debería pertenecer al pasado. El concepto de democracia participativa propone la creación de formas democráticas directas para atenuar el carácter puramente representativo. La realidad tecnológica contemporánea ofrece la posibilidad de pensar en nuevos modelos, más avanzados, que permiten la creación y el mantenimiento de canales de comunicación vivos y activos donde puede tener lugar un debate creativo, útil y plural. Canales de comunicación que permitan un intercambio fluido y ágil de información de manera continuada en el tiempo, desmontando el esquema estándar de ‘participación’ cada 4 años. Estos nuevos formatos permitirían nuevas formas de colaboración y de gestión de los bienes públicos así como la posibilidad de establecer un sistema de información que conectase de manera directa a técnicos y usuarios asegurando un mayor compromiso con la gestión urbana.
El debate existe en la Red, probablemente el espacio actual más democrático, la plataforma donde todos pueden expresarse en libertad de manera horizontal y donde las ideas fluyen multidireccionalmente. En Internet los ciudadanos disponen de las herramientas para la autoorganización, la creación de redes y de grupos de presión social pudiendo ser tan influyentes como los medios tradicionales que son controlados de una manera jerárquica por sólo unos pocos. Los últimos acontecimientos demuestran que se está implantando un nuevo orden mundial en el que las redes sociales juegan un papel definitivo. La caída de regímenes en los países del Norte de África, donde la libertad individual estaba mermada, confirma que la red ha sido la ventana de apertura y las redes sociales han sido determinantes.
Este nuevo paradigma afecta de manera transversal a muchos de los modelos que seguimos aplicando en los distintos campos y que ante esta nueva realidad han demostrado ser obsoletos e ineficientes. Como ejemplo, el concepto active learning, que establece un nuevo marco de aprendizaje en el que se redefine la relación entre profesor y alumno basándose en el hecho de que todos somos portadores de información y de conocimiento y el estudiante no puede ser un mero ‘espectador’.
Espacio público emergente
Actualmente el “lugar” donde con más éxito se están experimentando modelos de creación colectiva y auto-organización es sin duda Internet. La Red ha potenciado las identidades sociales y los intereses colectivos de la gente, convirtiéndolos en una fuerza con importante influencia en el ámbito urbano.
Por el contrario, el espacio urbano está cada vez más controlado y dirigido por el exceso de normas y restricciones, haciendo que su uso sea progresivamente menos espontáneo y creativo. Internet permite y potencia la interacción entre las personas, mientras que el diseño de muchos espacios físicos la anula.
Internet parece ofrecer un espacio para las relaciones sociales alternativo a los lugares tradicionales. Este hecho puede interpretarse como un problema al pensar que favorece el progresivo ‘vaciado’ del espacio público, o por el contrario, considerarse como una extraordinaria oportunidad para fortalecer las relaciones sociales locales, creando las condiciones necesarias para activar el espacio público tradicional y mejorar su vitalidad.
Según Juan Freire, la crisis de los espacios públicos (físicos) urbanos se debe también a la falta de un diseño abierto que vuelva a ofrecer a los ciudadanos un verdadero interés y ha conseguido introducir en el debate conceptos como “espacios híbridos”, para hacer referencia a las oportunidades ofrecidas por la hibridación de lo físico con lo digital en los espacios públicos y ofrecernos experiencias urbanas “aumentadas” por la sobreimpresión de información virtual a la información física ya existente. De nuevo en wikipedia nos encontramos con el término realidad aumentada que define una visión directa o indirecta de un entorno físico del mundo real, cuyos elementos se combinan con elementos virtuales para la creación de una realidad mixta a tiempo real.
Plataformas para la experimentación
Elinor Ostrom, Premio Nobel de economía 2009, ha dedicado años al estudio de modelos económicos autoorganizativos para demostrar que los bienes comunes –commons– pueden ser administrados de forma efectiva por un grupo de personas independiente, al margen de los jerarquizados organismos oficiales. Su trabajo constata cómo los seres humanos interactúan con el fin de mantener a largo plazo los niveles de producción de los recursos comunes existentes. Frente a la visión tradicional de los economistas que consideran que mantener tales recursos sólo es posible mediante la intervención estatal o el interés privado individual, Ostrom asegura que los usuarios de los bienes comunes desarrollan sofisticados mecanismos de decisión y reglas para gestionar los conflictos de interés que derivan en resultados positivos, habitualmente mejores que lo planteado por los modelos económicos tradicionales.
En la esfera urbana, existen iniciativas contemporáneas que incorporan al ciudadano como agente activo, huyendo del paradigma convencional del ciudadano como cliente-espectador-receptor del producto acabado para pasar a ser ciudadano-actor-productor en un proceso abierto, creando un espacio aumentado susceptible de ser modificado en función de las necesidades del usuario. Entendiendo la ciudad y sus espacios públicos como ámbitos sensibles en permanente transformación, capaces de adaptarse en el tiempo para responder a las distintas demandas, definiendo espacios como soporte o plataformas para la interacción y la experimentación. Numerosas experiencias de trabajo en red networking y cotrabajo coworking, pueden servir como referencia para la concepción de nuevos modelos de creación colectiva del espacio público y la ciudad. Incorporar al ciudadano en el proceso creativo tiene beneficios directos: puede mejorar el resultado, facilitar su desarrollo, aumentar la aceptación de la intervención y generar comunidad.
El cambio de paradigma, según lo hemos visualizado, tiene consecuencia directa en algunas experiencias urbanas contemporáneas. Es evidente que ha llegado el momento de participar. La pregunta es ¿cómo?, ¿con qué herramientas?, ¿cuales son los canales?, ¿qué papel puede desempeñar el arquitecto?.
A continuación presentamos una selección de experiencias que plantean usos, procesos o resultados alternativos al modelo tradicional de creación del espacio público (la dinámica cliente público-encargo-técnico responsable del diseño-ciudadanos receptores pasivos) y que han sido promovidas por los mismos agentes (ciudadanos, técnicos o administración pública) pero alterando las dinámicas jerárquicas habituales, mostrándonos que se abre una nueva dimensión infinitamente más creativa y estimulante.
Macropolíticas de microescala
El proyecto de Factoría Joven nace en 2006 con el objetivo de crear centros singulares para acoger todo tipo de manifestaciones juveniles en las cuatro ciudades más importantes de Extremadura (Badajoz, Cáceres, Mérida y Plasencia). En cada localidad, el primer paso es crear una agrupación de jóvenes, conocido como Movimiento Factory, que posteriormente guía el diseño de las instalaciones. Los arquitectos responsables del proyecto Factoría Joven de Mérida, consideran el resultado final el fruto de un proceso abierto y un diálogo fluido que ha permitido incorporar las inquietudes e ideas de los futuros usuarios como herramienta de trabajo en el proceso creativo. Zona de skate, hip-hop, break dance, rocódromo, graffiti, tunning, teatro al aire libre, libertad de horarios, protección de la lluvia, iluminación nocturna…un edificio que da respuesta a toda una serie de demandas de los usuarios.
En Zaragoza, un plan de empleo municipal sirve para lanzar el proyecto estonoesunsolar con el objetivo de transformar, a lo largo de 3 años, solares sin uso del centro de la ciudad en una red de espacios de uso público transitorio (parques, huertos y pistas deportivas), incorporando la participación ciudadana durante todo el proyecto, tanto presencial como en las redes sociales. Se contabilizan 59 actuaciones y la contratación de 112 parados de larga duración que han supuesto la reutilización de 42.000 m2 de vacíos urbanos como nuevos espacios públicos.
La ciudad alemana de Magdeburgo en 2005 emprende la estrategia “city in trial”, con la idea de relanzar la recuperación del centro urbano de una región post-industrial con un alto índice de paro, abandono de población, edificios vacíos y solares abandonados. El punto de partida de este experimento es el refuerzo de los vínculos sociales y la creación de otros nuevos, antes de acometer cualquier transformación física de la realidad urbana. El proyecto Open Air Library es una de las iniciativas, que comienza con el lanzamiento de un proceso participativo para el diseño de una “escultura social”, y que evoluciona hacia un equipamiento abierto para la lectura.
A lo largo de sucesivos eventos y festivales temáticos se recogen más de 30.000 libros donados por los ciudadanos y se construyen, con cajas de cerveza a escala 1:1, prototipos de los diseños más populares. El lugar comienza a conocerse popularmente como “bookmark”, hasta que en 2009 se inaugura el proyecto Open Air Library que materializa las aspiraciones ciudadanas. La plaza pública o cualquier otro espacio en la ciudad funcionan como una sala abierta de lectura.
Autoorganización
La antigua Fábrica de Tabacos de Madrid (Tabacalera) del barrio madrileño de Lavapiés será la sede del futuro Centro Nacional de Artes Visuales. El escenario de crisis económica paraliza temporalmente su desarrollo y el Ministerio de Cultura cede el uso de parte del edificio para un centro social autogestionado durante este periodo de ‘espera’. Tabacalera se ha convertido, desde su apertura pública (junio 2010) y en menos de un año, en un referente cultural, no sólo de los barrios colindantes, sino de toda la ciudad.
La filosofía creativa de Tabacalera establece espacios de trabajo y difusión que no se adscriben a individuos (estudios, exposiciones, etc) sino a prácticas y lenguajes (talleres, laboratorios). La estructura de distribución espacial, temporal y laboral de Tabacalera apuesta por que las prácticas artísticas más avanzadas compartan laboratorio de trabajo y espacios de discusión con las prácticas sociales y políticas del barrio y del resto de Madrid. Tabacalera apuesta por un modelo de producción colaborativo, de código abierto, y entiende la cultura como un proceso activo, vital e integrado en su entorno. Una de las ‘normas’ del espacio es que todas las actividades se realicen y ofrezcan de modo gratuito y toda la producción desarrollada se haga bajo “licencias libres”.
En 1996 un grupo de artistas se reúne entorno a la figura de Friedemann Derschmidte e inician la acción o ‘juego’ de desayunar en el espacio público, en ese momento nace permanent breakfast. Esta acción ha tenido réplicas en distintas ciudades del mundo: Praga, Berlín, Oslo, Melbourne… En Madrid, surge desayunosenlaluna, una iniciativa de miniocupación y reconquista del espacio público de la Plaza de Santa María Soledad Torres Acosta, popularmente conocida como Plaza Luna. Ciudadanos que reaccionan frente a la fuerte mercantilización del espacio y la carencia de las mínimas condiciones físicas que propicien un uso comunitario.
En Valencia desayunoconviandantes permite redescubrir distintos rincones de la ciudad a través de esta acción. El evento tiene lugar un sábado al mes y ofrece la oportunidad de vivir una experiencia única siempre en un entorno diferente. Una manera de estimular a la ciudadanía a través de este sencillo mensaje que lanzan en su web: traete tu taza, tu silla y tu desayuno…celebra la calle con nosotros, una manera atractiva y positiva de activar nuestra ciudad. También en Valencia surge alrededor de, la organización de eventos culturales en el espacio público con el objetivo de amplificar, estimular y deslocalizar la oferta cultural relacionada con la arquitectura y la ciudad, ubicándola en un contexto distinto del habitual, pudiendo llegar a un público más amplio.
El proyecto estaesunaplaza surge a raíz de un taller, donde estudiantes y jóvenes profesionales, transformaron un solar, cerrado durante más de 30 años (C/ Doctor Fourquet nº 24), en un espacio público para el barrio madrileño de Lavapiés. El propósito era crear un espacio de encuentro en un barrio extremadamente denso y con déficit de equipamientos. Tras una dilatada gestión con el Ayto. de Madrid obtienen la cesión de uso. El proyecto está activo y promueve un modelo de autogestión donde todo el espacio está a disposición de todos, las actividades son gratuitas y cada participante aporta parte de su tiempo para mantenerlo vivo.
Temporalidad
En septiembre de 2010, dentro del festival artístico y cultural concebido para una noche (La noche en blanco), surge Isla Ciudad, una instalación lúdica de carácter efímero en un solar del centro de Madrid. Este vacío urbano es generado por la reciente demolición de un antiguo polideportivo, paralizando el contexto de crisis económica el nuevo proyecto. La sinergia generada entorno al proyecto Isla Ciudad, desencadena un proceso reivindicativo que deriva en el proyecto elcampodelacebada : una iniciativa ciudadana para convertir este vacío en un espacio público temporal que permita la organización de actividades culturales, sociales, deportivas… El pasado mes de febrero de 2011, el Ayuntamiento de Madrid firma un acuerdo de cesión temporal que marca el comienzo de este esperanzador proyecto.
Hortas na cidade dos barrios es una iniciativa surgida en 2009 para tender redes entre lo rural y lo urbano a través de la implantación y recuperación temporal de huertas en parcelas abandonadas de la periferia de A Coruña. El equipo diseñador de la propuesta, Desescribir, crea los mecanismos para un proceso autónomo, que puede ser gestionado por sus participantes a lo largo del tiempo y no depende de la tutela de ningún agente concreto (diseñadores, administración…). Este proyecto se inicia contactando con los propietarios de parcelas en desuso para acordar su cesión, y presentándose públicamente la iniciativa, a propietarios, personas interesadas y posibles usuarios de las huertas. Posteriormente se crea la asamblea encargada de elaborar la normativa de uso de las huertas y los estatutos de la futura asociación de usuarios. Actualmente la iniciativa está gestionada por los miembros de esta asociación creada ex profeso.
Software social
El enlace (link) es uno de los elementos básicos de la Web. Desde su nacimiento, asociamos Internet a la “navegación”, al movimiento de una página a otra. Enlazar nos permite descubrir cosas nuevas y crear nuevas relaciones. El enlace propone una nueva estructura intelectual basada en un sistema de redes y relaciones entre una multitud de puntos más que en la concentración en unos pocos nodos. La síntesis de estos conceptos se puede encontrar en el proyecto Critical City que, a imagen de Internet, favorece dinámicas de interacción social lúdicas para vivir la ciudad como un lugar de oportunidad. Se trata de una Red social local donde los usuarios pueden proponer acciones urbanas, conocer a sus vecinos y mejorar el entorno en el que viven, potenciando las redes de contactos entre personas de un mismo barrio. El caso de la red Peuplade permite a los vecinos de una misma calle o barrio organizar fiestas locales con el objetivo de conocerse y relacionarse. Peuplade ofrece un soporte añadido para seguir desarrollando esas relaciones y permite el intercambio de favores y objetos.
Whatif es una herramienta web que actualiza el concepto de participación ciudadana a través del uso de la Web e integra a nuevos actores hasta ahora ausentes de las dinámicas clásicas de participación. Esta herramienta explora nuevos formatos que posibilitan la comunicación e interacción entre los distintos agentes que intervienen en la creación de ciudad. La web, con un sencillo interface, permite al ciudadano expresarse añadiendo comentarios y generando nuevas ideas para su calle, barrio o ciudad, con la posibilidad de subir fotografías y vídeos, estando toda la información georreferenciada y conectada con las redes sociales más importantes. La visualización de los resultados permite tener un mapa actualizado a tiempo real de deseos y necesidades de los ciudadanos.
En estos momentos se está desarrollando la aplicación whatif para móvil que permitirá a cualquier persona acceder a la plataforma e introducir contenido desde cualquier ubicación. Whatif está disponible bajo licencia creative commons permitiendo que cualquier ciudad o entidad del mundo pueda descargar, instalar y personalizar la herramienta para su propio uso.
No diseño
El espacio público de la ciudad no tiene un único uso, ni su diseño debería responder a un único tipo de usuario. Las ciudades globales tienden a homogeneizar el espacio público, obviando la variedad de comportamientos, el cambio constante y la flexibilidad necesaria para adaptarse a las nuevas formas de habitar y disfrutar la ciudad. El espacio físico está en constante cambio y movimiento y se alimenta de usos que en ocasiones se suceden, se intercalan o se solapan. La construcción de ciudades más saludables tiene que ver, necesariamente, con los “grados de libertad” que permita el diseño de su espacio público. La Charca de la Rana surge del empuje de un grupo de personas autoorganizadas para generar distintas actividades colectivas en un descampado próximo a su barrio (Parque de las Avenidas, Madrid). Este lugar, sin determinar por un diseño específico, ha permitido la implantación de un rango muy variado de situaciones urbanas (cine, mercado de trueque, huerto urbano, actuaciones…) que hubiesen sido conflictivas en cualquier otro lugar del espacio público ya consolidado.
El proyecto Post-it city / Ciudades ocasionales, nos descubre numerosas ocupaciones temporales del espacio público, más allá de dinámicas que identifican espacio público-ocio-consumo. ‘Frente a los ideales de la ciudad como lugar de consenso y de consumo, las ocupaciones temporales del espacio rescatan el valor de uso, desvelan distintas necesidades y carencias que afectan a determinados colectivos, e incluso potencian la creatividad y el imaginario subjetivo’. Una de estas ocupaciones temporales, Sundaying City, nos habla sobre las prácticas de ocio alternativo en la ciudad de Barcelona como resistencia a las dinámicas globales del entretenimiento que nos ofrece el “modelo Barcelona”. Competiciones de palomas, rallies y picnic, sitúan la figura del dominguero en la vanguardia de la apropiación e interacción democrática de la ciudad.
Participación open source
OneThousandSquare es la propuesta del concurso convocado por el ayuntamiento de Hamar (Noruega) para una intervención artística en el principal espacio público de la ciudad, la plaza Stortorget. El proyecto propone una solución alternativa al programa planteado en las bases, definiendo el proceso participativo que tendrá como resultado el diseño de la nueva plaza. El presupuesto destinado inicialmente a la intervención artística, se reparte a lo largo de un proceso de varios meses en un intenso programa de eventos, talleres y la construcción de prototipos a escala 1:1 de las ideas surgidas en las sesiones creativas.
OneThousandSquare impulsa la reflexión colectiva sobre el espacio público fortaleciendo las relaciones sociales y partiendo del supuesto de que construir un espacio público, más allá de su definición física, es construir una comunidad en torno a él.
OneThousandSquare es un proyecto abierto a la interacción local (ciudadanos de Hamar) y que promueve la participación global (ciudadanos a través de internet).
Actualización: OnThousandSquare fue finalmente puesto en marcha, con algunas variaciones, bajo el nombre de dreamhamar.org