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IdeaScale, una plataforma para fomentar la innovación abierta del sector público

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Apenas 1 día después de haber asumido como jefe de la Casa Blanca, hace más de 6 años, el 21 de Enero de 2009, el Presidente Barack Obama publica el memorandum Transparency and Open Government, un documento histórico y bastante ambicioso, en el cual se compromete a crear niveles de apertura, colaboración y participación nunca antes visto en la administración del estado. De esta manera Obama comenzaba a cumplir aquello que prometió durante su campaña a la presidencia; impulsar un gobierno abierto basado en altos niveles de transparencia, responsabilidad e inclusión. Si bien Obama no fue el primero en promover acciones en pos de administraciones más transparentes, abiertas, inclusivas y sensibles a las necesidades ciudadanas, su decidido compromiso con la causa inspiró el surgimiento de esfuerzos similares en otras partes del mundo. Temas como la apertura masiva de datos públicos y la decidida participación ciudadana en la toma de decisiones, en reformas legislativas y en la innovación del sector público se ha comenzado a escuchar y ver cada vez con más frecuencia alrededor del mundo.

Esta coyuntura social y política coinciden con la irrupción de nuevas tecnologías de la información y comunicación que al mismo tiempo han comenzado a redefinir la naturaleza y el alcance de la participación cívica y de la democracia misma. Estas tecnologías han permitido la aparición de nuevos escenarios de participación ciudadana donde la experiencia, el conocimiento, la opinión y la creatividad del ciudadano común han jugado un rol protagónico en la resolución de complejas problemáticas sociales, como la detección de focos de infección del mosquito del dengue (Dengue Chat), la toma de decisiones sobre asuntos de interés general, como en la reforma de leyes (Reforma Constitucional Participativa en Islandia), y en la innovación del sector público (Mi Ciudad Ideal).

Un ejemplo bastante relevante de estas tecnologías orientadas a la participación ciudadana es IdeaScale, una plataforma web de gestión de ideas que ha sido ampliamente empleada por distintas instituciones públicas, políticos y autoridades en sus intentos de generar espacios alternativos de intercambio de opinión, ideación y deliberación entre ciudadanos. Utilizada por la Casa Blanca para justamente recolectar ideas sobre medidas, estrategias y políticas que permitan al gobierno llevar una administración más transparente, participativa e inclusiva (OpenGov). También adoptada como plataforma de ideación colectiva por la National Aeronautics and Space Administration (NASA) para reclutar ideas y opiniones de la sociedad civil respecto a los planes de exploración de Marte (Mars Forum). Más recientemente, en Junio de 2013, IdeaScale fue elegida por el Ministerio del Ambiente de Finlandia y el Parlamento de aquel país como soporte para una iniciativa que buscaba la participación ciudadana en el proceso de redacción de leyes que regulen el tráfico de vehículos de nieve (Crowdsourcing Off-Traffic Law).

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IdeaScale es no solo utilizada en el dominio cívico también grandes compañías como EA Sport, CISCO, y Marriot la emplean como instrumento para incorporar ideas y sugerencias de sus clientes en la innovación de productos y servicios. En IdeaScale, los usuarios no solo pueden sugerir ideas, también votar a favor o en contra de alguna propuesta y emitir opinión respecto a las propuestas por medio de comentarios. Esta última funcionalidad permite que sean los mismos participantes quienes ayuden al refinar y mejorar las propuestas, así como también sentar una postura respecto a las mismas. A la descripción de toda propuesta puede ser acompañada una imagen o documento que facilite la comprensión de la misma.

Una de las principales ventajas de IdeaScale es la simplicidad de su interfaz de usuario y la utilización de interacciones presentes en la mayoría de las plataformas online hoy en día y ampliamente conocidas por usuarios de la web. Por ejemplo, publicar una idea no es muy distinto a publicar un post en alguna red social de propósito general, como Facebook o Google Plus, como lo muestra la Figura 1. Votar por una idea no requiere más que un simple click en botones similares al conocido Like/Unlike de Facebook. De igual modo, emitir una opinión sobre alguna propuesta significa simplemente añadir un comentario al pie de la descripción de la propuesta, tal cual ilustra la Figura 2.

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Además de una simple interfaz de usuario, IdeaScale, ofrece interesantes funcionalidades para organizar y manejar el contenido, es decir las ideas y comentarios. En primer lugar, las propuestas pueden ser agrupadas por tópicos o campañas. También, los mismos autores tienen la posibilidad de etiquetar sus propuestas con palabras claves (etiquetas) que faciliten su posterior localización. Dentro la plataforma las propuestas se organizan en tres formas, la primera, cronológica. Aquí las ideas se ordenan de acuerdo a su fecha de publicación, las más recientes aparecen al comienzo de la lista mientras que las primeras se encuentran al final. Las ideas también son organizadas por su popularidad, es decir aquellas ideas mejor valoradas por los participantes aparecen primero —el valor de una idea se calcula contrastando sus respectivos votos positivos y negativos. El interés de los participantes en las ideas es también tenido en cuenta a la hora de organizar el contenido, aquí el interés es medido considerando la cantidad de comentarios que una idea o propuesta recibió. La figura 3 ilustra los diferentes listados utilizados para presentar las ideas a los usuarios.

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Sin embargo, quizás la fortaleza más importante de IdeaScale son las funcionalidades ligadas al análisis del contenido. En este sentido, diferentes técnicas de filtrado y evaluación facilitan enormemente el trabajo de identificación y selección de ideas prometedoras. Al mismo tiempo la disponibilidad de un dashboard interactivo permite a los administradores controlar y monitorear diferentes aspectos de la iniciativa de ideación, como las campañas de ideas y el perfil de los participantes. En la  figura 4 se ilustran las funcionalidades de reporte que permiten conocer más detalles sobre las campañas de ideas.

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Un detalle no menor, respecto a IdeaScale, es el conjunto de APIs que ofrece. Estas permiten a desarrolladores construir aplicaciones sobre su plataformas a manera de extender las funcionalidades de la misma. Un ejemplo de esto, es Agora 2.0, aplicación web implementada utilizando estas APIs, que permite la sincronización de la plataforma online de IdeaScale con un frontend offline conectado a una pantalla pública. La excelente documentación ofrecida por IdeaScale facilita bastante la introducción al uso de estas APIs, inclusive existen clientes open-source, como IdeaScaly, que permiten ahorrar una cantidad importante de trabajo de implementación.

Como cualquier otra herramienta, IdeaScale tiene sus desventajas. Es limitada a la hora de hacer un seguimiento a situaciones de deliberación donde los participantes exponen argumentos a favor y en contra de una determinada propuesta; aquí se requiere de un instrumento bastante más estructurado que permita manejar este tipo de procesos. Tampoco es fácil controlar la evolución de las propuestas, que en la mayoría de los casos son refinadas y mejoradas por medio de comentarios de participantes luego de haber sido publicadas. Aunque dispone de funcionalidades que permiten integrar la plataforma a las redes sociales de propósito general, estas, desde mi punto de vista, son insuficientes perdiendo una importante oportunidad de enriquecer las procesos de ideación con opiniones, ideas y conocimientos vertidos en estos espacios virtuales de socialización.

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Sin dudas IdeaScale ha dado muestras suficientes de su utilidad como facilitador de procesos de creación e ideación colectiva. Desde la Casa Blanca, pasando por el Parlamento Finlandés, y llegando a pequeños gobiernos locales, todos se han beneficiado de la practicidad, potencia y simpleza de sus funcionalidades. Por tanto, si estás pensando en algún tipo de iniciativa de discusión, creación o ideación colectiva basada en la opinión y el conocimiento de la ciudadana, IdeaScale es definitivamente una opción a tener en cuenta ya que además de todo lo mencionado anteriormente ofrece una versión gratuita y puede ser utilizada en diversos idiomas.

¡Éxitos!

Jorge Saldivar, @jorgesaldivar, investigador experto en plataformas y sistemas de participación ciudadana.

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¡Más GeniUS, por favor! Experiencias con la innovación abierta en la ciudad

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Artículo de Mónica Nagore que nos transmite con su experiencia directa el valor que Genius: Open, una de las redes de transferencia de buenas prácticas de URBACT, ha aportado a las cuatro ciudades que participaron en ella. Este proyecto se puso en marcha para transferir desde York a otras ciudades un enfoque de innovación abierta en el cual los ciudadanos y las empresas trabajasen con la ciudad, a través de una plataforma de colaboración online, en la creación de soluciones innovadoras a los proyectos ciudadanos.

Llegamos a Siracusa en un día soleado y claro, 20 grados, mar plano. Una delicia. Preparados para el taller de consolidación del proyecto donde compartiríamos lo aprendido con nuestros socios, las “receiving cities” y, conjuntamente, sacaríamos conclusiones con el fin de ser útiles también a nuestros colegas de la red URBACT.

El proyecto de transferencia “Genius: Open”, nos ha dado la oportunidad de trabajar con tres grandes equipos, el del Ayuntamiento de Tallinn, el de Fomento de San Sebastián (organización responsable de la elaboración y ejecución del Plan de Estímulo Económico de la ciudad) y el del Comune di Siracusa. Las tres ciudades han conseguido adoptar y adaptar el modelo, por lo que este taller lo abordamos con la serenidad propia del que observa satisfecho el trabajo bien acabado y a la vez con grandes expectativas ante lo que concluiríamos conjuntamente con nuestros expertos y  socios que han demostrado gran capacidad y que se han convertido en inspiración para nuestro propio futuro.

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Echando la mirada hacia atrás, satisfechos con los logros alcanzados entre todos y, más allá del objetivo de transferir unas buenas prácticas de la ciudad de York, el deseo, y por qué no, la ambición, de haber aportado nuestro granito de arena a la ola de expansión de valores de apertura, colaboración, apoderamiento (empowerment) y transparencia que van desatándose en el campo de la administración pública en el mundo.

Y oteando el horizonte, con la ilusión de seguir trabajando en la misma línea pero, eso sí, con las lecciones (muchas) aprendidas en este nuestro primer viaje Urbact, y en el equipaje nuevos artículos: un modelo GeniUS renovado y capacidades adquiridas como transmisores-facilitadores del modelo.

Ciudades abiertas… a sus ciudadanos, a las personas

Tallinn, San Sebastián y Siracusa han hecho una inmersión en los principios de la innovación abierta, experimentando nuevas formas de relacionarse con sus stakeholders y usuarios de sus servicios, fortaleciendo así los vínculos existentes con los “viejos” colaboradores pero además estableciendo nuevas alianzas.

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No obstante, recuerdo todavía los inicios, el miedo escénico de todos ellos al explicar a sus stakeholders (habituales y nuevos) que iban a liderar la implantación de un modelo participativo del que sabían poco y para el que contaban con su ayuda y colaboración directa a lo largo del proceso. Hace falta valor. Los principios de innovación abierta en los que está basado el modelo sustentaban su convencimiento de que éste iba a servir para encontrar soluciones a los retos que afrontaban sus ciudades gracias a la capitalización del potencial creativo de sus stakeholders y ciudadanos.

En todos los casos la reacción de éstos fue tan positiva como inesperada. Unánimemente valoraron la valentía de las instituciones y mostraron su entusiasmo con la oportunidad que se les brindaba de ser parte activa en la definición tanto del reto como de sus soluciones. Este reconocimiento inicial a las entidades lideres del proyecto en cada ciudad sirvió para dotarlas de la confianza tan necesaria para seguir el camino de cambio que se les abría en aquel momento.

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Habían conseguido el apoyo y entusiasmo de sus stakeholders. ¿Y ahora qué? La respuesta estaba clara: trabajo, empuje y creatividad.

Nuestro equipo en York había elegido un enfoque de coaching/mentoring para la transferencia del modelo Genius, lo que permitía una mayor flexibilidad en el modelo mismo para su mejor adaptación a tan diversos contextos.

Cuatro ciudades, cuatro personalidades, cuatro GeniUS

En Tallinn el modelo se extenderá al resto de departamentos en el área de Educación a través de un plan de formación y promoción. El nuevo modelo aseguran aportará ideas nuevas y más creativas a la toma de decisiones estratégicas anuales. La experiencia esta sirviendo para romper esquemas en la forma de trabajar, habiendo incorporado por primera vez en mesas de decisión estratégicas a representantes de padres, profesores y alumnos. En su primer proyecto piloto, la “Student Academy”, los propios estudiantes han formado parte del diseño y ahora del desarrollo del mismo.

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Donostia-San Sebastian ha abordado en su primer reto la empleabilidad de jóvenes cualificados y el proyecto co-creado con sus stakeholders permitirá conectar “talento joven” con pequeñas y medianas empresas con necesidad de llevar a cabo proyectos estratégicos pero sin recursos suficientes para ello. Además tiene previsto ir transfiriendo la filosofía de innovación abierta a lo largo de la organización conforme se vayan afrontando nuevos retos en el futuro, haciendo visible una nueva manera de hacer las cosas con sus ciudadanos que se alinea con una corriente de proyectos de participación que están llevando a cabo desde hace ya un tiempo distintas organizaciones en la ciudad, pero dando un paso más en la co-creación y co-desarrollo de soluciones creativas.

Siracusa ha sobrepasado todas las expectativas, no sólo las nuestras sino las del propio equipo inicial y el propio Comune. Decidieron abordar la mejora de uno de los barrios periféricos de la ciudad: “La Mazzarrona”. Es un claro ejemplo de capitalización de la capacidad creativa e innovación de sus ciudadanos y de la cohesión del grupo, incluyendo la administración local, escuelas de La Mazzarrona, la parroquia, y otras entidades y empresas locales. Todo ello en un contexto no falto de riesgos si tenemos en cuenta los índices de paro, abandono escolar o familiares de presos. Los ingredientes mágicos: valentía, corazón, tesón e inteligencia estratégica del equipo inicial pero también, clave, el coraje, impulso y empatía de los residentes de La Mazzarrona, especialmente “le mamme” que, no sin reticencias en un inicio, vieron en el proyecto los ingredientes necesarios para iniciar un camino que les permitirá ofrecer un nuevo y mejor futuro a sus hijos, y así se han convertido en protagonistas y motores del cambio en su barrio. El proyecto evidenciará la Grande Bellezza de La Mazzarrona a través de cuatro inicitivas ya en marcha y gestionadas por la recién creada Casa dei Cittadini (Casa del Ciudadano).

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Y en York, hemos pasado de ser “giving city” a “receiving city”. Esta experiencia de transferencia, y gracias a lo aprendido de nuestras ciudades socias, nos ha permitido diseñar un modelo totalmente renovado que pondremos en práctica con el siguiente reto, además de dotarnos de capacidades y herramientas para futuras transferencias. ¡Más GeniUS, por favor!

Mónica Nagore Santandreu
Innovation Project Manager, City of York Council

Más información sobre el proyecto GeniUS: Open

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Collection of e-papers on Collective Intelligence in ArXiv | Link + download

Category: ⚐ EN+downloads+findings+research+resources

If you are interested in collective intelligence, crowdsourcing, collaboration, reputation mechanisms, collective decision making and related topics, then you’re in for a treat!

Collective Intelligence - Illustration by vladgrin on Shutterstock

Collective Intelligence – Illustration by vladgrin on Shutterstock

The page may look unimpressive at first sight; you could say it’s pure ‘Internet 1.0’, but the contents are really worth a careful look. Along with full e-papers, it contains poster papers and abstracts from plenary sessions at the MIT. They are usually available as downloadable PDFs and in other formats, sometimes even including video.

2012 collection of e-papers on Collective Intelligence – arXiv

ArXiv is one of the oldest (1991: that’s pre-World Wide Web!) and most well-known repositories for electronic preprints of scientific papers in different fields of science which can be accessed online and downloaded. It is now hosted and operated by Cornell University, with 14 mirrors around the world.

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MetaMap | [im]possible living, rethinking the abandoned world

Category: ⚐ EN+city+internet+Intervista+MetaMap+technologies+urbanism

[im]possible living is a crowd-sourcing website dedicated to mapping and reactivating abandoned buildings around the world.

[im]possible living wants to be an enabler and a catalyst of the energies available in every place in the world that are not able to get through and give birth due to the abandonment market and, in general, to a new housing development model. It’s a very ambitious goal, but we truly believe in it and are investing everything in this dream!

I interviewed the two founders, Daniela Galvani and Andrea Sesta, about the project.

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1. How did you get to the practice of mapping? 

[im]possible living is born from our personal interest in abandoned buildings. At the time we understood that many individuals and associations were spreading energies to map the abandoned buildings in their area, but everyone was doing their own maps, thus losing the possibility of sharing results, experiences, and the best possible practices.

So we decided to create a global map of abandoned buildings via a web platform, where everyone could participate and contribute to a common goal and benefit from the experiences of other people.
Since the beginning of the project we have gone far beyond mapping tools. With the last release of our site, people can now reactivate an abandoned building and involve the community in the design concept for the new life of the building.

2. How is the users’ contribution managed? How does the platform work?

The website consists of a service through which users can surf and see the abandoned buildings that have been mapped around the world, which also shows their profile, containing a general description and some detailed information about the building (year of construction, years of abandonment, square meters, number of floors, etc.) To explore the mapped buildings click here.

The real heart of the service, however, is the reporting and collaboration features, through which users can upload new abandoned buildings and enrich existing records by adding photos and videos. If you would like to begin a map click here.

Users can also use a mobile app for the iPhone to instantly map abandoned buildings. Once launched, the application allows you to choose a photo from the Pictures archive, add essential information and automatically provide the geographic data associated with the location (street, city, etc.), allowing the user to change any incorrect information.

The last new part, which has launched recently, allows users to start a reactivation process. Once an abandoned building is mapped, a user can decide to become the reactivator of the place and [im]possible living provides him/her with a suit of services that helps collect the needs of the area, ideas for the future of the building, and in general, create a community that supports the reactivator in designing a concept for the new life of the building. The platform also tries to connect different kinds of users, everyone possibly involved in the renovation process: citizens, entrepreneurs, professionals, artists, real estate developers, etc.

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These services are now online and we already have some projects running that you can contribute to or simply surf to get an idea:

Padiglione Conolly by RETESPAZZI
Sottopassaggio pedonale di Porta Vescovo by AGILE
Edificio 3 by workinco
Residenza by LANGYX
Villa Olga by BIELLAINMENTE
Ex Casa albergo per anziani by SIMONACOLUCCI
Ex-macello comunale by ASSBUENAONDA
Ex-Ospedale San Giacomo by ASSBUENAONDA
Masseria O’ Sentino by INDIEVIDUI
Stabile di uffici abbandonato by DANYGALVANI
Palazzo Cosentini by CARLONATOLI

3. What is the process you wanted to start with your work? What is the social aim you wanted to reach with your work?

In the last years we have witnessed the constant investment in new construction, leaving behind millions of old abandoned buildings. This process has led to the phenomenon of land consumption in most of the world, but the recent economic crisis stressed the problem even more, condemning the new constructions to remain vacant.

The solution to this problem is taking an altogether new approach: abandoned buildings are not liabilities but assets from which we should take the most possible advantage. [im]possible living tries to promote this new sustainability approach. Instead of building new structures over and over again, we can utilize what already exists. Having abandoned buildings in your city or in your neighborhoods is not only a waste, but it also means trouble, that, in a long term perspective, becomes costly for the public sector.

We are creating a platform available to all, which consists of the most complete database of abandoned buildings in the world. It is a virtual place that everyone can use and all can be shared and discussed, and where citizens can actually have an influence in shaping the future of the place they live in.

Many times the interests of construction companies, or even publicadministrations, are not consistent with the local environment of the area itself. This missing link between those sides can be discussed through the [im]possible living platform, in order to build mutual benefits for both sides. Through the website, entire communities can share their needs and ideas, and this could lead to a win-win situation for all parties involved.

Nowadays, real estate projects are handled behind closed doors and the problem is that often the local population is not involved in the design process. This implies, on the one hand, a mismatch between the purpose of the construction project and the real needs of the urban and social settlement. On the other hand, it takes additional time to complete due to the resistance from local communities, which often brings in legal involvement.

Our aim is to create a more efficient process to reuse abandoned structures, with a benefit for local communities that will be able to affect or even contribute projects on the online platform. A benefit for the public and private investors that would receive important inputs or even entire concepts developed by teams of reactivators and a benefit for the reactivator teams that would pursue their own projects with all the technological, professional, and financial support to fully accomplish their goal.

4. What is the next phase of development that your research will undergo?

We released the reactivation services a few months ago, so now our aim is to expand the community as much as possible and start as many reactivation projects as possible. This is very connected to making the available services better, making the actions easier, making the contributions from the community as simple as possible, and adding new features that can increase the sharing activity on the site.

Furthermore, we want to investigate the real bottleneck of reactivation processes: getting the project funded! In fact, the real problem when you talk about abandoned buildings is that, even with low-cost interventions, using them involves pricey investments. So our question is: How do we ease the investment process? How can we push for better projects and actually bring them to life? It’s complicated research, but it’s definitely what we want to focus on during the next year.

5. What are you personal references for the theme of mapping (from ancient to contemporary ones)?

Our point of view is very connected to recent technologies, in particular, web technologies. We consider the birth of web 2.0 and web 3.0 the beginning of a new era: the shift from static contents to dynamic ones, but more importantly, the participation and involvement of people in crowd projects, tools created for geo-localization, augmented reality, and much more.

This had a dramatic impact on the theme of mapping: for the first time in history, people from around the world could contribute to global mapping projects seamlessly, using services like Google Maps, Open Street Map, Wikimapia, History Pin, Ushaidi, Foursquare, and thousands of other services that are enabling users to map things in the world and share the information globally.

This process is generating a huge amount of data that, in most cases, is openly available to everyone via API systems (in computer science, an API is a way to access private databases, retrieve information, and build a new service using one or many different external data sources) For example, today I can use Google Maps API to obtain geographical information and then use Wikipedia to map monuments and historical places.

The potential of this revolution is very immense and has already started to affect our society in a significant way, but we still can’t entirely understand all the possibilities that will be generated in the upcoming decades.

Site: [im]possibleliving
If you would like to know more, visit their BlogFacebook and Twitter, or read their FAQ

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Crowdfunding… ¿aplicado al desarrollo urbano?

Category: ⚐ ES+arquitectura+cultura abierta+espacio público+LCV+sostenibilidad+tecnologías+urbanismo

El boom del crowdfunding. Una idea nada nueva, con nuevos medios.

El crowdfunding o financiación colectiva (o en masa) es un concepto que viene de lejos y que se puede definir sin mucha complicación: consiste en la financiación de un proyecto a través de la suma de muchos aportes, generalmente de baja cuantía, frente al modelo del gran inversor. Por ello también se le conoce como micromecenazgo. Pero esa definición esconde muchas complejidades, como iremos viendo.

Las prácticas de préstamo o apoyo microfinanciero tienen un doble origen. Por un lado en la necesidad de las comunidades con recursos escasos de generar recursos de capital para desarrollar proyectos productivos o personales de sus miembros. Hay modalidades en distintos contextos culturales en las que los participantes generan un fondo general al que se tiene acceso por turno o sorteo, mientras que en otras variantes la financiación tiene lugar entre individuos (peer to peer). Por otro lado el crowdfunding se puede entender como un desarrollo de la tradición filantrópica, especialmente en países anglosajones con una fuerte tradición de la sociedad civil donde la donación constituye una forma de contribución a la mejora de la comunidad, una forma de lograr estatus para el donante y exenciones fiscales. En Estados Unidos la cultura de la donación es muy importante y a menudo supone el desarrollo de proyectos vitales para los sectores más desfavorecidos a los que las políticas del Estado no llegan o lo hacen de forma insuficiente. En este contexto es importante fijar el comienzo del crowdfunding con interés social o comunitario en una evolución natural en la que las nuevas tecnologías se convierten en una herramienta decisiva para atomizar el concepto de donación, a la vez que aproxima proyectos e iniciativas a la sociedad en general, que a menudo reacciona en relación a estímulos solidarios, identitarios o políticos.

Desde principios de los 2000 el microcrédito se fue acercando a las nuevas tecnologías, dando lugar a plataformas como Zopa, Prosper o Lending Club. Unos años después, le llegó el turno al crowdfunding propiamente dicho: cuando en 2009 apareció la primera plataforma online de este tipo, Kickstarter, se hizo rápidamente evidente que sus creadores habían dado, no sólo con un filón de negocio importante, sino con una forma de relacionar economía y cultura que iba a dar que hablar. A día de hoy no dejan de emerger nuevas plataformas en diferentes contextos y con distintas modalidades, a un ritmo cada vez más acelerado.

Con esto, era inevitable que tarde o temprano nos hiciéramos la primera pregunta que queremos abordar aquí:

¿Es posible aplicar la financiación colectiva a proyectos de transformación urbana, sean de arquitectura, de intervención en el espacio público o de diseño urbano? ¿Qué conseguiríamos con eso?

Parece lo mismo, pero no es igual.

Ante esta pregunta se ha generado un interesante debate, planteado tanto desde el punto de vista teórico como desde la práctica y el activismo.

Las primeras respuestas fueron directas y sin concesiones: probarlo. Poner una pieza de mobiliario urbano, un jardín comunitario y hasta una gran piscina experimental como +Pool, directamente en Kickstarter, metiéndolos en la categoría de diseño entre una pulsera y unos calcetines, y ver qué pasaba. Total, sólo es una diferencia de tamaño y cantidad, ¿no?

Plus pool en Kickstarter

¿Lo es, realmente? Alexandra Lange lo pone en duda en su artículo Against Kickstarter urbanism (Contra el urbanismo Kickstarter), en cuyo encabezado web se puede leer, entre líneas de código, que el título original era en realidad un menos contundente pero más ilustrativo “puedes kickstartear una cuchara comestible, pero no una ciudad”. El artículo, que también comentaba Bernardo Gutiérrez en su recientísimo post ¿Crowdfunding para ciudades?, está lleno de dudas más que razonables.

Una plataforma de financiación apta para un reloj no es una plataforma de financiación apta para una ciudad. Las expectaciones, los plazos y la comunidad relevante son salvajemente diferentes. […] La línea de tiempo de los proyectos urbanos, los permisos requeridos en la vida real y los enormes costes de construcción son muy poco adecuados para el enfoque de Kickstarter. […] Un parque va a requerir mucho más que 5€ y un “¡Buena idea!”.

Es cierto. Entre el dinámico vídeo de presentación o los atractivos renders iniciales y el proyecto acabado hay más distancia de la que muchos usuarios pueden percibir o entender en el momento de decidir si hacen o no su aportación. La complejidad real del proceso que un gran proyecto tiene detrás acaba dejando aquella página inicial de Kickstarter como un mero ejercicio de storytelling tan hueco como bien intencionado.

Propuestas como + Pool o LowLine tienen una cosa en común: muestran la evocadora imagen final de un proyecto muy ambicioso (imperativos del marketing), pero en realidad piden fondos para un primer paso realista y casi modesto: un prototipo a escala real de la solución constructiva a emplear. La visión y el plan de trabajo se confunden, provocando que un micromecenas poco atento caiga fácilmente en el error de obviar la distancia que hay entre ese primer prototipo (diez o veinte veces más costoso que la media de los diseños completos presentes en la misma plataforma) y el proyecto final construido y utilizable (a un nivel de presupuesto muchísimo mayor). Como dice Lange en su artículo, “el sueño consumible estaba a años y burocracias de distancia”.

Todo ese “lastre” no visible, en forma de trámites, procesos de diseño, requisitos, agentes implicados, dificultades técnicas, condiciones legales, apoyos o desconfianzas varias y demás elementos que un profesional de estas áreas conocerá bien pero que incluso él difícilmente podrá prever, es lo que Dan Hill de Sitra llama “materia oscura” y sitúa como uno de los temas a resolver por cualquier plataforma de crowdfunding que quiera aspirar a lanzar proyectos de gran escala.

Lange concluye su artículo con un decepcionado “todo lo que el formato [de Kickstarter] puede manejar son pequeñas piezas del puzzle, como gizmos [o gadgets]”. Pero como comentan en un artículo de Project for Public Spaces que responde en cierta manera al de Lange, esto puede ser también una oportunidad:

Las estrategias destinadas a dar vida al espacio público a corto plazo pueden ser una manera extraordinariamente efectiva de construir el soporte de la comunidad para proyectos más grandes.

Lo cual podemos reconocer como la base de muchos proyectos de urbanismo táctico que, a través de acciones ligeras de bajo perfil económico y pocos requerimientos burocráticos, han logrado despertar una comunidad a su alrededor. En el urbanismo táctico o en cualquier proceso de transformación urbana de estas características no se produce exclusivamente una intervención en el espacio o en la trama urbana. Los proyectos que se desarrollan de abajo a arriba (bottom-up) son procesos en los que a menudo se producen negociaciones, generación de conocimientos, nuevas narrativas sobre el espacio y la identidad del lugar y de sus habitantes. Todo ello constituye un valor añadido que a menudo supera en el tiempo la vida de la dimensión física de la intervención.

Las plataformas genéricas de crowdfunding han demostrado ser muy aptas para financiar y lanzar “dispositivos”, objetos o construcciones de pequeña escala, bajo coste y alta replicabilidad, que muchas veces tienen más potencial para transformador que otras infraestructuras de gran porte. Parece razonable incorporar esta particularidad, como un aprendizaje, en cualquier plataforma específica que esté por aparecer.

Aula Abierta Sevilla en Goteo


Pero… insistimos en ir a lo grande. ¿Qué plataformas necesitaremos?

Tras intentar usar una plataforma existente como Kickstarter (o Goteo, con proyectos como el Aula Abierta de Sevilla, o cualquier otra) y descubrir que no valen para todo por igual, los promotores inquietos con grandes proyectos entre manos vuelven su mirada hacia las propias plataformas: Si estas no nos valen, ¿cómo es la plataforma que vamos a necesitar?

Como respuesta a esa pregunta comienzan a aparecer webs más especializadas como Spacehive, una web de crowdfunding para proyectos de mejora de vecindarios, Civic Sponsor, que se define como una plataforma de financiación para proyectos públicos, o Ioby, para proyectos dirigidos a la mejora del entorno local. Sin embargo, éstas aún se parecen muchísimo  al modelo de Kickstarter y no incorporan los aspectos específicos de escala, tiempos, gestión, comunidad, etc. que acabamos de comentar.

Una plataforma que quiera resolver esa complejidad tiene que plantearse cada proyecto como un todo interrelacionado con problemas más generales que el de su financiación, como los referentes a la participación, al contexto, al apoyo y coordinación de los agentes implicados, al proceso de trabajo en sí, a los posibles conflictos con los cauces oficiales del planeamiento (la convivencia de ciudadanos e instituciones que comentaba Bernardo), etc.

Los proyectos, en una plataforma así, deberán estar compenetrados con una comunidad, o ayudar a crearla, en lugar de quedar exclusivamente sujetos a las vicisitudes del marketing como sucede muchas veces en el crowdfunding, donde “gana” el que tiene el vídeo más llamativo, o más amigos, o el que mejor ha sabido contar su historia.

Y por si fueran pocos requerimientos, las plataformas digitales plantean dudas relacionadas con la brecha digital: ¿Cómo resolver la relación entre entre la comunidad local, del lugar, y la global, de las redes sociales? ¿Cómo hacer llegar este proceso y estas herramientas a la gente que no está en la red? ¿Cómo hacer transparente en el espacio físico lo que sucede en el digital, y viceversa?

¿Hay algún proyecto que esté abordando este desafío a día de hoy? Podemos encontrar varios, incluyendo los mencionados más arriba que están en constante evolución, aprendiendo de sí mismos. Uno de los que más claramente están abordando este proceso de diseño de nuevas plataformas es Brickstarter.

Hablábamos antes de Dan Hill y el concepto de materia oscura. Pues bien, este es sólo uno de los muchos aspectos que desde Brickstarter, del cual él forma parte, se están replanteando. Frente al enfoque más bien inmediato de proyectos como Spacehive, éstos han optado por abstraerse de lo que actualmente se entiende por plataforma de crowdfunding y tratar de dar forma a algo nuevo que integre los diferentes aspectos mencionados. Su blog es una inspiradora colección -de lectura recomendable- de profundas entrevistas y detallados análisis claramente dirigidos a extraer conocimiento del estudio de casos.

Para hacernos una idea rápida (aunque parcial) de por dónde van sus planteamientos, basta con que nos fijemos en uno de los bocetos preliminares que, en un buen ejercicio de transparencia, han publicado en el blog:

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Esto ya no se parece tanto a Kickstarter, ¿verdad? Aparecen un buen montón de conceptos nuevos: escala, tiempos, valor, agentes de varios tipos (promotores, partidarios, patrocinadores), una clara diferencia entre el estado de financiación, de apoyos y de aprobación o permisos, un seguimiento de problemas, debates, algo que parece un feed local, etc. Este boceto tiene una profundidad de planteamientos y una complejidad detrás que ya parecen más acordes con el tema. Y sólo es un esbozo muy preliminar de una futurible plataforma online, que con toda seguridad es (o idealmente debería ser) sólo una parte del plan de trabajo de Brickstarter.

Para acabar este artículo dando pie a nuevas reflexiones os dejamos, como propuesta no cerrada, una serie de planteamientos que pensamos que deberían tratar de incorporar las plataformas de crowdfunding centradas en proyectos públicos y desarrollo urbano:

  • Mostrar todo el proceso y sus implicaciones, incluida la “materia oscura”.
  • Permitir empezar desde la pequeña escala, valorando el potencial de los dispositivos “low-” y el enfoque del urbanismo táctico para dar pie a proyectos mayores.
  • Aportar y visualizar un valor de retorno en cada paso del proceso, tras cada ciclo convocatoria-desarrollo-logro.
  • Cambiar el enfoque de la plataforma, desde una simple financiación colectiva hacia un “qué necesitamos para que esto suceda”, en el que se incluya la entrada de acciones y recursos distintos del simple aporte de dinero, como ya sucede en Goteo o en Civic Crowd.
  • Combinar el anterior con un enfoque de “gestión integral del proyecto”, del que la financiación colectiva (o mixta entre lo colectivo y lo institucional) sea sólo una parte.
  • Plantear esa plataforma como una base ligera sobre la que añadir diferentes “herramientas” de gestión, de forma que sea adaptable a proyectos más o menos complejos sin abrumar al usuario.
  • Asumir que la plataforma no lo es todo, y que hay toda una serie de canales, medios o espacios que tendrán que ser tenidos en cuenta y coordinados entre sí.
  • Aceptar que estamos al comienzo de un camino, un camino que se hará al andar.

 

Este artículo es fruto de una colaboración entre Andrés Walliser (@andreswalliser), desde Nueva York, y Jorge Toledo (@eldelacajita), desde Madrid, a través de Ecosistema Urbano (@ecosistema), para el blog de La Ciudad Viva.

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P.D. de Jorge: Esta entrega sobre el tema iba a terminar aquí, pero en el momento de su publicación sucedió algo que bien merecía extenderse un poco más. Andrés y yo teníamos muchas ganas de escribir acerca de esto porque de alguna manera se percibe como un tema que “está en el aire”, que está en el aire con tal densidad que llega al “punto de condensación”. Y es que como los cazanieblas, parece ser que las redes en que nos movemos contribuyen a condensar las ideas y las hacen fluir hacia la corriente (en inglés, tal cual: stream) de la conversación colectiva. Tres días antes de la publicación original de este artículo, y con este todavía en sus huesos, Bernardo Gutiérrez publicó su artículo ¿Crowdfunding para ciudades?. Dos días después, la red seguía goteando: cuando me disponía a rematar y publicar el artículo, me llegó de pronto una inesperada invitación desde Think Commons a un hangout, una sesión de videochat online. Un timing de primera. Al entrar me encontré a Carlos Cámara, Ferrán Reyes y Domenico di Siena en pleno debate sobre… sí, este mismo tema. De modo que no he pude menos que incorporar este texto a la conversación, y viceversa.

Aquí tenéis un vídeo, fruto de ese momento de serendipia, que es casi la versión audiovisual de este artículo. Os lo recomiendo porque aborda algunos de los puntos clave comentados en este artículo, y unos cuantos más que no tienen desperdicio y que entrarán con seguridad en alguno próximo.

Hangout sobre co-financiación de las ciudades

Para los más impacientes: alrededor del minuto 19′, la conversación, inicialmente errática, enlaza de forma natural con el tema del crowdfunding, y hacia el minuto 37′ es cuando me incorporo y comenzamos a conectar con lo comentado en este artículo.